Estudió cine de animación en la Escuela Nacional de Artes Decorativas de París, para luego dedicarse a su primera pasión: ilustrar libros para niños y niñas.

Sus personajes de ficción preferidos son las brujas, los monstruos, los feos y los malos, ya que considera a las princesas y a las hadas demasiado suaves. Además, los villanos siempre son más divertidos de dibujar.

Sus fuentes de inspiración son diversas, como las atmósferas de Tim Burton o el arte de la ilustradora Rebecca Dautremer. También le fascina el mundo de los insectos, a los que teme, pero finalmente ama.

Ha recibido varios premios de ilustración en Estados Unidos y Canadá, donde vivió durante diez años. Hoy, divide su tiempo entre París y Montreal.

Cuando dibuja, le interesan los peces de aguas profundas, los gatos -a pesar de ser alérgica-, las plantas raras, leer libros e ir al cine. Su color favoritoes el rojo cadmio.

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